Trabajar las tradiciones de la localidad en la escuela infantil permite acercar a los niños y niñas a su entorno cultural y social más cercano, ayudándoles a sentirse parte activa de su comunidad. Desde edades tempranas, conocer y participar en las costumbres, fiestas y celebraciones locales favorece el sentido de identidad, pertenencia y respeto por la cultura propia.
Estas primeras semanas de octubre y, una vez finalizado el periodo de adaptación, se ha trabajado la vendimia como una actividad muy significativa en la localidad, ofreciendo a los niños y niñas experiencias sensoriales, manipulativas y vivenciales relacionadas con la recolección de la uva, el prensado y la transformación del mosto. Esta propuesta ha favorecido el aprendizaje activo, la observación del entorno y el descubrimiento de las tradiciones familiares y comunitarias.
Estas experiencias contribuyen al desarrollo integral del alumnado, enriquecen el lenguaje, estimulan la curiosidad y fortalecen los vínculos entre escuela, familia y comunidad, en coherencia con los principios educativos, que promueven una educación infantil globalizada, cercana y contextualizada en el entorno del niño y la niña.