La Cooperativa Virgen de las Viñas–Bodega y Almazara de Tomelloso celebró este miércoles su tradicional comida de vendimia, un encuentro que reúne a representantes del sector vitivinícola, responsables políticos y agentes sociales en pleno desarrollo de la campaña.

Por parte del Ayuntamiento de Tomelloso asistieron la teniente de alcalde, Eloísa Perales, el concejal de Agricultura, Jesús Lara, y la segunda teniente de alcalde, Elena Villahermosa, que acompañaron al presidente de la entidad, Rafael Torres, y al resto de autoridades presentes.

En su intervención, Rafael Torres subrayó la importancia de los procesos de concentración de cooperativas que se están tramitando, asegurando que supondrán “un gran beneficio para Tomelloso y para Castilla-La Mancha”. Torres incidió en que “la unión es mucho mejor que la competencia y no significa diluirse, sino multiplicarse”, y alertó de la grave caída de los precios de los subproductos del vino, que calificó de “ruinosos” para los agricultores.

La teniente de alcalde, Eloísa Perales, incidió en que “con precios de los años 90 no se puede subsistir”, señalando que este es un negocio de céntimos en el que resulta imprescindible “dejar a un lado nuestras vanidades y luchar por un objetivo común. Juntos seremos mucho más fuertes”.

Perales aprovechó además para trasladar a los socios de la cooperativa los avances de proyectos municipales que afectan directamente a la entidad, como la fase definitiva de urbanización del Polígono 30, donde se trabaja ya en la interconexión administrativa y en la recopilación de informes sectoriales, y el estudio de delimitación del tramo urbano de la carretera N-310, que permitirá a la cooperativa recuperar terrenos junto a la vía para la ampliación de su nave inteligente.

La comida de vendimia volvió a poner de manifiesto que el futuro del sector pasa por la unión, la innovación y la defensa de un ámbito esencial para la economía y la identidad de Tomelloso y de toda Castilla-La Mancha.

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